En la misma jornada, la nueva autoridad recorrió en solitario y de manera espontánea los pasillos de los pisos 6 y 7 de Teatinos 120 -donde se ubica el SII- saludando a los funcionarios, dando cuenta de uno de sus objetivos más inmediatos al asumir la cabeza de la entidad: recomponer las confianzas y desarrollar un perfil cercano, en medio del complejo clima interno tras la bullada salida del ex director, Michel Jorratt, en medio de los casos Penta-SQM.
En su primer día en el cargo, Barraza no sólo se dedicó a recorrer pasillos y estrechar manos: la autoridad envió una carta a los funcionarios donde expuso sus primeras definiciones.
En la misiva, a la cual tuvo acceso Diario Financiero, señaló su «enorme orgullo» por volver como director al organismo -en el que estuvo entre 1992 y 2009-, pero tampoco eludió la difícil coyuntura.
«Como resulta evidente para todos, mi llegada coincide con uno de los momentos más complejos que le ha tocado vivir al servicio, cuya imagen se ha visto deteriorada ante los contribuyentes y la opinión pública, afectando la confianza y credibilidad frente a nuestro accionar», afirmó sin tapujos el directivo.
A continuación, Barraza aludió a su trayectoria: «Conozco esta instutición, sé que se trata de una entidad técnica, profesional y seria, que cumple con su obligación legal con responsabilidad e independencia».
Junto con señalar que es «optimista» frente al «enorme desafío» que enfrenta, Barraza apeló a los funcionarios. «Tengo la más absoluta confianza en que, trabajando juntos, con verdadera mística, rigurosidad, respeto y cohesión interna, seremos capaces de sacar la tarea adelante y devolver al servicio a la posición de privilegio y merecido prestigio que históricamente ha tenido», aseguró.
Una agenda apretada
En apenas siete días, Barraza ha desplegado una intensa agenda no sólo para aplacar los ánimos internos, sino también para generar puentes a nivel de los poderes del Estado en una cruzada por recuperar el «prestigio perdido» del SII.
De esta manera, ya se ha reunido con la contralora (s) general de la República, Patricia Arriagada; el presidente de la Corte Suprema, Sergio Muñoz; el director de la Policía de Investigaciones (PDI), Héctor Espinosa; y el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.
El factor Lara
De hecho, la llegada de Lara es funcional a uno de los objetivos claros de Barraza en esta nueva etapa: que las querellas como recurso de persecución penal se mantengan, «pero no contra todo el mundo».
«Lara no es de la línea de presentar querellas a diestra y siniestra, sino más bien de usarlas con criterio técnico», comenta un cercano al abogado.
Fuente: Diario Financiero (extracto). 21 de agosto de 2015.
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